Nos acercamos a octubre y con ello el brócoli se convierte en una de las hortalizas de temporada. He querido hacer un plato un poco distinto al brócoli hervido que todos conocemos. De este modo, podemos disfrutar más de la cocina y del sabor de este alimento.
El brócoli es una crucífera que nos ofrece muchísimos beneficios. Uno de los más importantes es el gran efecto anticancerígeno gracias a su alta cantidad de antioxidantes. También nos ayuda a mejorar el perfil lipídico, es decir, a reducir el colesterol.
La combinación de verduras en este plato nos aporta una alta cantidad de fibra, ayudándonos a mantener un buen tránsito intestinal. Las semillas de sésamo nos aportan grasa saludable como el omega-3. Por último, los dátiles le dan un toque dulce al plato.
INGREDIENTES
- Brócoli
- 1 pimiento rojo
- 2 zanahorias
- Rúcula
- Brotes de alfalfa
- Semillas de sésamo
- 4 dátiles
- Romero
- Hierbas provenzales
- Comino
PREPARACIÓN
- Ante todo, lavar y cortar el pimiento rojo y las zanahorias en trozos pequeños
- Después, lavar el brócoli y separar los “arboles” del tronco.
- A continuación, calentar una paella (sartén) y echar una cucharada sopera de aceite de oliva. Cuando este caliente, añadir el pimiento rojo y las zanahorias con una pizca de especias (romero, hierbas provenzales y comino). Ir removiendo hasta que estos estén cocinados.
- Añadir el brócoli y saltearlos suavemente durante unos minutos.
- Por último, colocar la rúcula en un plato. Posteriormente, añadir la verdura cocinada, los brotes de alfalfa, un puñado de semillas de sésamo y los trozos de dátiles previamente troceados.
¡A disfrutar!
Autora: Martina Rebull @comeypedalea