Si a día de hoy te sigues preguntando si realmente es importante incluir el entrenamiento de fuerza en tu rutina, la respuesta es clara y es un rotundo SÍ. Siempre te hablamos de ello y es que es necesario por muchos motivos. En función de tu experiencia y capacidades, deberás hacerlo con más o menos intensidad, con más o menos frecuencia en un principio. Hoy te hablamos de algunos motivos por los cuales es importante estimular la musculatura. No lo pases por alto y… ¡ah!, por si crees que ya es tarde para empezar a entrenar la fuerza: AHORA siempre es el mejor momento. ¡No lo olvides! ¡A por todas!
La masa muscular forma parte de nuestro complejo sistema músculo-esquelético. Esta nos da la capacidad de movimiento. Además, interviene en la correcta posición corporal y nos mantiene con una adecuada higiene postural. Eso sí, siempre y cuando esté bien cuidada y estimulada. Por esta razón, y por muchas otras, hoy en día se habla tanto de la enorme importancia de incluir el entrenamiento de fuerza en nuestra rutina, al menos semanalmente.
Estimular la musculatura, ¿por qué?
La masa muscular ha de estar convenientemente estimulada para que se mantenga activa y funcional. ¡Hay que darle motivos para ello! Asimismo, este aspecto contrarrestará los efectos de una vida sedentaria y unos hábitos inadecuados. En la actualidad, muchas personas sin ser del todo conscientes tienen hábitos sedentarios fruto de muchos factores. Trabajos que obligan a pasar jornadas en la misma postura o el ya extendido teletrabajo son algunos de ellos y es conveniente compensarlo para evitar ciertas consecuencias negativas sobre la salud..
El adecuado mantenimiento de nuestro sistema músculo- esquelético supone un seguro de vida cuando se alcanzan edades avanzadas y nos facilita la actividad del día a día. Nos permite ser físicamente autónomos durante muchos años más. Esto puede resumirse como algo que cualquier persona desearía tener, desde el día de hoy y para el resto: calidad de vida.
Para garantizar que se le da un estímulo adecuado, no es necesario pasar dos horas en el gimnasio. Puedes comenzar con dos o tres horas semanales e ir modificando tus entrenamientos en función de tu evolución. No lo dejes pasar y ten en cuenta que será clave la periodización y progresión en cargas para que el músculo continúe recibiendo estímulos que le den razones para crecer y estar fuerte.
Ahora que cuentas con esta información, empieza a cuidar tu cuerpo con una mayor conciencia. Agradece lo que es capaz de hacer y compensa el tiempo de inactividad con ejercicio, movimiento y, por supuesto, con la adecuada estimulación de la musculatura. Ponte retos, ¡cúmplelos! ¡A por todas!
