Mantener una correcta higiene postural va mucho más allá de un aspecto superficial con el único objetivo de verse mejor. Aunque esta también es una razón de peso, hay otras cuestiones de mayor relevancia, como la óptima salud y calidad de vida. En este sentido, es importante prestar atención a nuestro cuerpo tanto si permanecemos en una posición estática como dinámica. Hoy vamos a contarte algunos tips para mejorar la postura al caminar y obtener así los grandes beneficios que reporta atender a una buena posición del cuerpo. ¿Te interesa seguir avanzando en tu estilo de vida saludable? ¡Pues toma nota!
Son muchos los beneficios de mantener una buena higiene postural y debes saber que esto, también se entrena. Cuando tomamos la determinación de mejorar nuestros hábitos y, en consecuencia, nuestra salud, no debemos quedarnos en la fachada de lo que esto supone. Debemos emprender una apasionante búsqueda para sentirnos mejor cada día a todos los niveles. De esta forma, además de aumentar el bienestar, nos conoceremos más a nosotros mismos y lograremos ser más productivos al rebasar nuestros propios límites. Mejorar la postura al caminar, y en general, puede suponer un cambio más importante de lo que a priori te puede parecer. Y es que una buena postura corporal:
- Favorece la respiración
- Combate estados de fatiga y cansancio
- Reduce la aparición de diferentes dolencias especialmente en espalda, hombros y cuello
- Protege los músculos y las articulaciones
- Favorece la circulación sanguínea
- Reduce la tensión muscular
- Aumenta la sensación de bienestar…
8 Tips para mejorar la postura al caminar
- Trata de crecer como si alguien tirase de tu cabeza hacia arriba. Siéntete más alto o alta.
- Lleva la mirada al frente, no hacia arriba ni hacia abajo.
- Mantén los hombros hacia abajo y hacia atrás y procura que tus orejas se mantengan en línea con ellos.
- Los brazos caen junto al cuerpo y se mueven de manera natural. No hay tensión.
- El talón llega primero al suelo y luego avanza naturalmente hasta la punta del pie.
- Intenta mantener las caderas en una posición neutra en lugar de rotarla hacia atrás.
- Mantén una ligera activación del abdomen.
- Asegúrate de distribuir el peso corporal sobre ambos pies. Si cargas con peso adicional trata de no llevarlo a un lado y equilíbralo.
Debes saber que si te propones mejorar la postura al caminar, notarás cierta incomodidad al principio, como si la nueva posición fuera demasiado “forzada”. Esto es completamente normal y, por ello, debes mantenerte consciente del cambio para no volver de manera inconsciente a las viejas costumbres. Al cabo de poco tiempo, empezarás a sentirte más relajado y cómodo y el resto de beneficios vendrán de manera progresiva, pero dotando a tu vida de una mayor calidad.