En la actualidad, cada vez somos más conscientes de la importancia que tiene cuidar activamente nuestra salud mental. Lo que antes parecía un tema tabú o complicado de tratar cada vez queda más expuesto, dejando a la vista la necesidad de cuidar este plano de nuestra salud, que es fundamental. Poco a poco vamos comprendiendo cómo repercuten los problemas mentales y emocionales en el bienestar y calidad de vida y vamos disponiendo de más herramientas para gestionarlo. Hoy queremos hablarte de algunas manifestaciones de la ansiedad y recomendarte cómo abordarlas para dar luz a situaciones complejas.
Gracias a la gran información profesional y de calidad que se divulga hoy en día, la sociedad está cada vez más familiarizada con algunos términos que hasta el momento no eran tan conocidos. Aprovechamos para recordarte que es esencial que siempre que consultes información sobre cualquier temática, lo hagas en lugares oficiales o en voz de profesionales en cada materia, apostando por la información contrastada y huyendo de sesgos que puedan resultar perjudiciales.
Si padeces ansiedad, o la sufre alguien cercano, puedes haber experimentado cantidad de síntomas asociados. Y es que cada persona la vive de una forma única y, por lo tanto, es imposible aportar unas recomendaciones generales para superarla. Sin embargo, te hablamos de un paso a dar que puede suponer un antes y un después para cualquier persona.
Manifestaciones de la ansiedad
Algunos ejemplos de cómo puede manifestarse la ansiedad, y que podrían ayudarte a identificarla, son (entre mucho otros):
- Mover alguna parte de tu cuerpo de forma nerviosa.
- Hacer más de una actividad a la vez.
- Pensar con frecuencia posibles escenas catastróficas.
- Hacer todo rápido como si fuera urgente.
Estos son solos algunos ejemplos, pero no los únicos. La preocupación y la agitación, el cansancio, la dificultad para concentrarse, la tensión e irritabilidad, el insomnio, el aislamiento social o los miedos irracionales son más síntomas de la ansiedad. También lo son a nivel físico el aumento del ritmo cardíaco, la sudoración, los temblores, la sensación de falta de aire, los problemas gastrointestinales… La persona que la sufre puede experimentar alguno o varios de ellos al mismo tiempo.
Existen varios tipos de ansiedad y en diferentes intensidades, así como infinidad de causas que la pueden ocasionar y para las que muchas veces podemos requerir atención profesional.
Pedir ayuda es un acto de valentía
Como comentábamos al comenzar el post, en la actualidad se trabaja desde distintas perspectivas para que quienes lo necesiten puedan pedir ayuda y dar el paso hacia el bienestar. Y es que todos la necesitamos cuando no nos sentimos capaces de gestionar nuestras dolencias o no sabemos qué es aquello que las está ocasionando.
Lo más recomendable sería acudir a un profesional de la psicología que pueda escucharnos y darnos las herramientas que estamos necesitando. Cuando, por distintos motivos, el ir a terapia no resulta posible, es importante encontrar un círculo seguro de confianza, donde poder expresar las emociones y sentirse escuchado y comprendido sin juicios. Por lo tanto, desde Vikika Team te animamos a que mires hacia dentro te atiendas, porque es posible superar los baches. Identificar los que nos ocurre, cómo nos hace sentir y expresarlo ya es un paso muy importante hacia la sanación.
Por nuestra parte, si nos necesitas, puedes contar con el equipo de psicólogas de Vikika Team. Y es que la terapia proporciona un lugar seguro donde explorar las raíces de la ansiedad y aprender estrategias para gestionarla. Gracias a la terapia podemos desafiar y cambiar patrones de pensamiento negativos y construir una base sólida para lograr el bienestar emocional.
Buscar ayuda jamás será una señal de debilidad, sino un acto de valentía. No dudes en informarte acerca de nuestros planes de psicología y empieza hoy mismo a poner luz en la oscuridad.