Quererse a uno mismo, ¿cómo lograrlo?

Si una cosa está clara, es que somos nosotros quienes de verdad vamos a acompañarnos el resto de nuestra vida. Nuestro cuerpo es nuestro hogar y gracias a él podemos desempeñar cada acción del día a día y estar presentes en el momento. Cuesta creer que diferentes experiencias puedan estropear la relación que muchas personas tienen consigo mismas, llegando a despreciar parte de lo que son y olvidándose de que estrechar la propia relación es esencial. Hoy te damos algunas claves para quererse a uno mismo y te invitamos a reflexionar sobre este importante aspecto. Y tú, ¿te quieres y respetas lo suficiente?

Quererse a uno mismo va mucho más allá de aceptarse en un espejo. Es algo que nace de la profundidad, del respeto y comprensión. Muchas veces nos castigamos por cometer ciertos errores, por no ser perfectos en determinadas circunstancias o por no tener la palabra exacta en el momento justo y eso es un error. Comprender cada paso que damos y ser conscientes de que la perfección no existe, que lo hacemos lo mejor que podemos, es fundamental. Quererse a uno mismo significa escucharse, atenderse, tomar el camino que nos hará sentir bien a pesar del ruido exterior; cuidarse, perdonarse y aceptarse.

¿Cómo lograr quererse más a uno mismo?

Cuidado con la autoexigencia

Exigirnos lo que podemos dar, nos permite estar motivados y seguir adelante en el camino hacia nuestros objetivos. Y es que muchas veces conformarnos con lo que tenemos y permanecer en la zona de confort nos impide avanzar. No obstante, esta autoexigencia puede ser un arma de doble filo si pretendemos alcanzar ciertas metas y, sobre todo, si queremos hacerlo YA. Ve paso a paso hacia aquello que de verdad te apasiona, perdónate si todavía no tienes claro el camino y permítete fallar. Estos fallos que se dan en el trayecto son el verdadero aprendizaje y, lejos de suponer un fracaso, son las lecciones que te ayudan a evolucionar y madurar y te convierten en alguien más experimentado.

Acéptate sin complejos

Tanto a nivel externo como interno, somos únicos y eso ya debería hacernos valorar 100 % nuestro ser. La perfección no existe tal y como la imaginamos, porque ya somos perfectos tal cual. Esto no quiere decir que no debas trabajar por mejorar lo que quieres cambiar, tanto a nivel físico como interno. Trabajar en uno mismo también es un acto de amor propio. No obstante, aceptar la realidad de ciertos aspectos que nos conforman es también imprescindible para no caer en complejos y frustraciones, puesto que algunos rasgos no se pueden cambiar y deben ser abrazados, no rechazados. En ocasiones no es fácil, seguro, pero tener la intención de hacerlo y buscar la ayuda necesaria siempre sumará.

No te compares

Lo que otros consigan y el tiempo que les lleve conseguirlo no es asunto tuyo si no vas a poder alegrarte por ello. Respeta tu camino y tus tiempos. Céntrate en el presente y en hacer cada día lo que te haga sentir bien, las cosas sucederán cuando dejes de forzarlas. No sabemos lo que ocurre a nuestro alrededor, pues solo vemos una parte superficial. En las redes sociales, por ejemplo, no consumas un contenido que te provoque frustración, puesto que no siempre es real y tú puedes conseguir lo que te propongas, igual que los demás, si trabajas en ello y en ti. Si vas a observar los logros ajenos, que sirva para inspirarte, para gestar la idea de que las cosas son posibles y alcanzables, para motivarte y no al contrario.

Enfoca tu atención

Si eres de esas personas que se quejan continuamente por las circunstancias, identifícalo y deja de hacerlo. No te acomodes en el victimismo para justificar la falta de decisión, de seguridad o de ganas. Asume tus limitaciones y abrázalas porque también son parte de ti. Nunca será el momento perfecto, tan solo es el momento y hay que aprovecharlo y disfrutarlo para sentir bienestar y convicción de que estás donde quieres estar. Enfócate en ti y redescúbrete porque te sorprenderás.

Muévete

Si algo está claro, es que estancarte no te llevará a ningún lugar nuevo. Arriésgate, ponte a prueba, haz realidad tus sueños y no te quedes con la espinita por no haberlo intentado. ¡Vive experiencias! Estás aquí hoy y eso es un regalo, aprovéchalo. Pero ojo, no caigas en el error de creer que todo lo que se disfruta está fuera o lejos de ti. Tienes todas las herramientas para ser feliz en cualquier lugar, en momentos dinámicos o de descanso, en casa o fuera de ella… no te pongas metas inalcanzables, simplemente valora el momento.

Aliméntate bien, haz deporte, descansa

Estos tres pilares fundamentales para un estilo de vida saludable deben estar siempre presentes cuando hablamos de amor propio y autocuidado. Dale a tu cuerpo alimento que le nutra y le permita desempeñar la rutina con energía. Mejorando tu alimentación, mejoras tu vida. El ejercicio físico frecuente es también básico, trabaja cardio y fuerza y gana en salud y vitalidad. Por otro lado, el descanso NO está reñido con aprovechar la vida. Hay que descansar, es necesario par resetear cuerpo y mente y también te permite disfrutar de momentos de introspección. Quererse a uno mismo sucede cuando hay respeto, comprensión, amor y cuidado hacia lo que somos.

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp

Deja una respuesta

SUSCRÍBETE