Tips para disfrutar de una siesta perfecta

La hora de la siesta es el momento más esperado para aquellos a los que les cuesta llegar con energía a todas sus obligaciones. Y es que lejos de suponer una pérdida de tiempo, tiene grandes beneficios. Sin embargo, esta puede ser un arma de doble filo si no se tienen en cuenta ciertos factores. Descubre cómo disfrutar de una siesta perfecta. ¡Date este pequeño y saludable capricho!

El descanso es fundamental para disfrutar de un estilo de vida saludable y recargar la energía que se requiere para afrontar los días. Sin descanso, la productividad disminuye en todos los campos. De nada sirve exprimir nuestras capacidades físicas e intelectuales si, posteriormente, no vamos a permitirnos un merecido y necesario descanso. La siesta, aunque no siempre es necesaria ni todo el mundo la requiera, es un recurso genial para hacer una pequeña pausa en la jornada. No obstante, esta debe cumplir una serie de características para obtener los resultados deseados en lugar de los opuestos.

Tips para una siesta perfecta

Duración corta

El sueño nocturno atraviesa varias fases que permiten que nuestro cuerpo y mente se reseteen y descansen correctamente. La siesta, en cambio, debe ser corta y no exceder los 20-25 minutos. De lo contrario, podríamos interrumpir posteriormente el sueño profundo y despertar con más sensación de fatiga que la que teníamos inicialmente. Esto también provoca despertarse con aturdimiento o de mal humor. Así que si quieres una siesta efectiva y placentera, recuerda no alargarla en exceso. Veinte minutos y estarás totalmente renovado/a.

No a la oscuridad total

Aunque debes crear un ambiente propicio para lograr el descanso, es importante que no te vayas a dormir en una habitación totalmente oscura. Esto podría prolongar tu sueño y hacerte perder la noción del tiempo. Recuerda que no buscas un sueño profundo, sino un break que te permita recargarte para continuar con el día. Algo de luz, sin excesiva intensidad, es la solución.

A una hora prudente

Si no quieres que la siesta entorpezca tu sueño nocturno, intenta hacerla temprano, antes de las tres de la tarde sería lo ideal. De lo contrario podría interferir en el estado de relax de la tarde noche y dificultar la conciliación del sueño.

Establece un horario

Es importante que planifiques el día. Además de evitar realizar la siesta tarde y que esta interfiera en el sueño nocturno, como indicamos en el punto anterior, hay más razones. Saber de antemano qué tareas tienes que hacer por la tarde y organizarlas en un horario, evitará que estés dándole vueltas a tus tareas cuando te vayas a echar la siesta. Sabiendo que todo está controlado, dispondrás de una mayor facilidad para relajarte y descansar.

Posición confortable

Aunque no buscas una siesta larga ni un sueño profundo, sí quieres un descanso efectivo. Para ello es importante optar por ropa cómoda y estar tumbado/a. Si por el miedo a dormir demasiado lo haces vestido con vaqueros y sentado en el sofá con la televisión puesta acabarás de mal humor ante la incomodidad y la dificultar para relajarte. Por ello planea una siesta corta pero muy efectiva, ponte una alarma, ropa cómoda y túmbate. Disfruta de un momento tan placentero y reconfortante.

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp

Deja una respuesta

SUSCRÍBETE