Consejos para empezar a correr por la montaña

Para iniciarse en la práctica de correr por la montaña, es fundamental un entrenamiento acorde con las necesidades de esta disciplina. Independientemente de si eres deportista experimentado o no, deberás empezar de cero para ir adquiriendo la dinámica de forma progresiva. Te contamos cómo hacerlo y te damos algunos consejos básicos para lograr tu objetivo con éxito.

Uno de los aspectos básicos que debes recordar a la hora de empezar a correr por la montaña, es que no es aconsejable lanzarse a lo loco. Por mucha experiencia que tengas en el mundo del running, hacerlo por la montaña requiere unas necesidades muy específicas. Si no lo haces con conciencia, es probable que esta apasionante práctica, acabe decepcionándote e incumpliendo tus expectativas.

Consejos para empezar a correr por la montaña

  1. Es evidente que, si has decidido empezar a correr por la montaña, es porque estás buscando darle un punto más de dificultad a tu entrenamiento de running. No obstante, debes saber que ser corredor/a no te va a hacer un experimentado en la montaña. Es necesario que te adaptes al terreno y, para eso, deberás comenzar dando largas caminatas por la montaña. Es imprescindible conocer los desniveles y dificultades a las que tendrás que hacer frente una vez te lances a la carrera.
  2. Es muy aconsejable que te prepares físicamente de forma complementaria. Por ello, realiza un entrenamiento específico para tren inferior, sin olvidar el mantenimiento del cuerpo en general. Trabaja gemelos, cuádriceps e isquiotibiales y lleva a la montaña los deberes hechos. ¡Lo agradecerás!
  3. Como en cualquier disciplina deportiva, es imprescindible llevar un calzado adecuado a las necesidades. Por ello, hazte con uno que aporte sujeción y comodidad y que sea válido para este tipo de terrenos con desniveles y cambios imprevistos. Hoy en día puedes encontrarás a buen precio y que reúnan las características necesarias.
  4. Dentro de la equipación, es fundamental llevar agua, algún snack, documentación y móvil. No te confíes en este sentido ya que en la montaña puedes encontrarte con circunstancias imposibles de prever. Tanto si vas en solitario como en compañía, hay que ser precavido/a y estar a la altura. Asimismo, planea un itinerario y una ruta y síguela a rajatabla. Posteriormente, analiza si ha sido fácil para ti y adáptala en la próxima salida. Pero no es necesario improvisar porque podrías darte cuenta tarde de que el entrenamiento se te está resistiendo más de la cuenta.
  5. No olvides disfrutar de las maravillosas vistas, respirar aire puro y ser consciente de lo maravilloso que resulta practicar deporte al aire libre. Muestra agradecimiento ante la posibilidad de exponerte a este tipo de disciplinas y sé paciente con tu progresión. Como cualquier reto, necesita constancia para cumplirse. ¡A disfrutar!
Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp

Deja una respuesta

SUSCRÍBETE