Tips para una relación sana con el deporte

Llevar a cabo un estilo de vida saludable requiere el cumplimiento de una serie de hábitos. Entre ellos encontramos la adecuada nutrición, el descanso de calidad, las relaciones sociales enriquecedoras, la práctica de ejercicio físico… ¡y muchos otros! Sin embargo, en el camino por mejorar estos aspectos, podemos desarrollar una mala relación cuando no acabamos de sentirnos satisfechos y caemos en una elevada autoexigencia. Toma nota de estos tips para una relación sana con el deporte y disfruta de la plenitud y el bienestar que mereces.

Planificar una rutina, comer adecuadamente a diario, cumplir con el plan de entrenamiento que nos hemos marcado, descansar… Todo ello, en rasgos generales, forma parte de un estilo de vida saludable. Ahora bien, ¿qué ocurre cuando queremos forzarnos y encajar en una forma de hacer las cosas que no va con nosotros? Que podemos sentirnos desbordados, insatisfechos y creer que no valemos para cumplir ciertos propósitos. ¡Nada más lejos de la realidad!

Lo importante es entender que cada persona tiene unas circunstancias y necesidades propias y que lo importante es adaptar cada parte de la rutina a nosotros y no al revés.

Lograr una relación sana con el deporte

A continuación, te contamos una serie de tips para una relación sana con el deporte, para que dejes de pensar que nunca conseguirás hacer lo que te propones; que no vales para eso, que no se te da bien o que nunca encontrarás la satisfacción en el movimiento. ¡Toma nota!

Descubre por qué quieres hacer ejercicio físico

Es muy importante, antes de proponerte cualquier reto, que tengas claro para qué lo estás haciendo. ¿Qué esperas que ocurra? En este campo y en cualquier otro es importante tener un propósito, un «para qué». De este modo, cuando flaquee la motivación o te invadan las dudas, tendrás un pretexto al que recurrir, una razón que te empujará a seguir adelante sin tirar la toalla. Ahora bien, esta sensación de tener ganas de abandonar puede aparecer en algún momento, pero si es algo frecuente, es importante que tomes nota de los siguientes tips.

Identifica qué actividad te hace sentir mejor

Es importante que te propongas realizar una actividad que de verdad te haga sentir bien y que deje en ti unas sensaciones posteriores agradables. Y no hablamos de huir de las agujetas y del esfuerzo, sino te escucharte y descubrir si eso que estás haciendo vibra contigo. Una cosa es que cumplir un reto requiera una dosis de esfuerzo y disciplina hasta que nos sintamos adaptados; otra, muy distinta, es hacer un sacrificio sobrehumano para ser constantes en algo que no nos gusta ni nos hace sentir bien. En este sentido, te recomendamos probar varias disciplinas deportivas hasta dar con aquella o aquellas que despierten emociones positivas en ti.

Ve más allá de la parte estética

Aunque los resultados físicos a nivel exterior forman parte de los beneficios de hacer deporte, hay que ir más allá. Lo principal es eso que no se ve, pero se siente. La energía, la vitalidad, la confianza, la sensación de capacidad y fuerza para enfrentar el día a día; también a nivel mental mediante la autoestima, la reducción de síntomas asociados a la ansiedad o depresión, la mejora en el estado anímico. Si te centras únicamente en si has perdido peso o no, si has adelgazado o ha crecido la musculatura, es probable que te olvides de lo realmente importante y se empañe todo lo que estás logrando. Da tiempo al cambio y enfócate en lo realmente importante, de lo contrario no tendrás una relación sana con el deporte.

Adaptación diaria

Las personas somos seres cambiantes y no estamos cada día con el mismo ánimo y disposición. Es por eso que te recomendamos dedicar un tiempo antes de entrenar a hablar contigo mismo, a conectar con tus emociones del día y a darte un empujón; a saber qué te apetece, qué necesitas o qué herramientas necesitarás para afrontar el reto. No esperes tener a diario la mayor de las motivaciones, a veces hay que echar mano a la capacidad de perseverar y ser constantes. Otras veces, simplemente, el cuerpo pide descanso y hay que dárselo. Un buen consejo para esos días es hacer un descanso activo: mantenerse en movimiento sin grandes esfuerzos (caminar, estirar, yoga suave, etc.).

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de Vikika Team (@vikikateam)

Si cumples con estos tips es probable que empieces a construir una relación más sana con el deporte a través de la conexión, la sinceridad y el autoconocimiento. Nada mejor que hacer algo con lo que realmente nos sentimos bien, mostrar respeto y paciencia por los resultados y saber que vamos a lograr aquello que nos hemos propuesto. Ahora solo tienes que ponerlo en práctica y demostrarte lo que vales.

¡Y recuerda! En Vikika Team estamos para ayudarte en cuestión de alimentación, ejercicio físico y salud mental, gracias a nuestro equipo de nutricionistas, psicólogas y preparadores. Consulta nuestros planes y da el paso hacia tu gran transformación.

Share on facebook
Facebook
Share on twitter
Twitter
Share on whatsapp
WhatsApp

Deja una respuesta

SUSCRÍBETE